La poesía está en todo
El río Eume entre los árboles, un día de niebla y de invierno
Cuando estudiaba 5º de Filología Hispánica tuvimos la oportunidad de elegir la optativa de Lengua Rumana. El profesor, no recuerdo su nombre, había conseguido huir del régimen de Nicolae Ceausescu y llegó ya empezado el curso. No sé qué habrá sido de él. Al principio era un hombre triste, demacrado y envejecido, dueño de una mirada resignada cargada de agradecimiento y nostalgias. A final de curso empezaba a ser feliz. Compró ropa nueva y rejuveneció. Aprobó a todos los alumnos. Yo aprendí rumano. Aún conservo los apuntes pero olvidé ya una lengua que no tuve oportunidad de hablar jamás. Sin embargo, sigo teniendo presente a un poeta del cual nos hablaba, Marin Sorescu. En clase traducíamos sus poemas. A mí el que más me gusta es este, que en su lengua original se titula "Am legat". Lo copio tal y como lo conservo en una libreta, traducido por mí:
He atado a los árboles por los ojos
con una pañoleta verde
y les he dicho que me encuentren.
Y los árboles me han encontrado inmediatamente
con una carcajada de hojas.
He atado a los pájaros por los ojos
con una pañoleta de nubes
y les he dicho que me encuentren.
Y los pájaros me han encontrado con un canto,
con un canto.
He atado a la tristeza por los ojos
con una sonrisa
y la tristeza me ha encontrado al día siguiente
dentro de la pasión.
He atado al sol por los ojos
con mis noches
y le he dicho que me encuentre.
Estás ahí, ha dicho el sol,
detrás de aquel tiempo,
no te escondas más.
No te escondas más,
me han dicho todas las cosas
y todos los sentimientos
a los que he intentado atar por los ojos.
Cuando estudiaba 5º de Filología Hispánica tuvimos la oportunidad de elegir la optativa de Lengua Rumana. El profesor, no recuerdo su nombre, había conseguido huir del régimen de Nicolae Ceausescu y llegó ya empezado el curso. No sé qué habrá sido de él. Al principio era un hombre triste, demacrado y envejecido, dueño de una mirada resignada cargada de agradecimiento y nostalgias. A final de curso empezaba a ser feliz. Compró ropa nueva y rejuveneció. Aprobó a todos los alumnos. Yo aprendí rumano. Aún conservo los apuntes pero olvidé ya una lengua que no tuve oportunidad de hablar jamás. Sin embargo, sigo teniendo presente a un poeta del cual nos hablaba, Marin Sorescu. En clase traducíamos sus poemas. A mí el que más me gusta es este, que en su lengua original se titula "Am legat". Lo copio tal y como lo conservo en una libreta, traducido por mí:
He atado a los árboles por los ojos
con una pañoleta verde
y les he dicho que me encuentren.
Y los árboles me han encontrado inmediatamente
con una carcajada de hojas.
He atado a los pájaros por los ojos
con una pañoleta de nubes
y les he dicho que me encuentren.
Y los pájaros me han encontrado con un canto,
con un canto.
He atado a la tristeza por los ojos
con una sonrisa
y la tristeza me ha encontrado al día siguiente
dentro de la pasión.
He atado al sol por los ojos
con mis noches
y le he dicho que me encuentre.
Estás ahí, ha dicho el sol,
detrás de aquel tiempo,
no te escondas más.
No te escondas más,
me han dicho todas las cosas
y todos los sentimientos
a los que he intentado atar por los ojos.
Comentarios
Pensativo, las manos a la espalda, voy por la vía férrea,
el camino más recto
posible.
Detrás, a toda velocidad
viene un tren
que nada sabe de mí.
Ese tren-Zenón el viejo es testigo-
jamás me alcanzará,
pues siempre yo tendré una ventaja
frente a las cosas que no piensan.
Incluso si con brutalidad
pasará sobre mí,
siempre habrá un hombre
que camine ante él
pensativo,
las manos a la espalda.
Como yo ahora
frente a ese negro monstruo
que se acerca a una velocidad espantosa
y que no me dará alcance
jamás.
La foto la hice yo en un maravillo parque natural natural cercano a mi casa, Las fragas de Caaveiro. Cuando te acerces al norte de Galicia no dejes de visitarlo.
Un abrazo, Carlota.
Me di cuenta de que eran las fragas ya al ver la foto pequeña en mi blog, jajaja.
Precioso el poema, por cierto. Un besazo y felices vacaciones.
Un abrazo.